21 de enero de 2009

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EL SECRETO DE LA PAZ INTERIOR


El hecho de estar inmersos en una sociedad e la interacción constante con otros individuos es la principal fuente de conflictos que pueden derivar en un desequilibrio personal y la consecuente pérdida de paz interior.


Las actitudes de los otros provocan muchas veces en nosotros pensamientos y emociones negativas que rompen nuestra armonía interna y actúan como tóxicos para nuestra alma y nuestro organismo. Tendemos a culpar a los demás de nuestro malestar, como si fueran ellos los que lo originan. No nos damos cuenta que realmente somos nosotros los que permitimos que actitudes ajenas entren en nuestro ser y lo desequilibren.

TRABAJO con REIKI


Para empezar es importante que te centres en el chacra corazón. Armoniza el resto de chacras con el chacra corazón visualizándolo de color rosa. Siente como se extiende la luz partiendo de tu corazón y llena la habitación, sigue extendiéndose y llega a las personas que quieres. Intenta sentir el amor incondicional que profesas a esos seres queridos. Extiende tu amor más allá, alcanzando a amigos, conocidos y finaliza llenando de luz de amor a todos los seres.
Practica regularmente este ejercicio.

TRABAJO de MEDITACIÓN


La clave esta en el trabajo interior que personalmente puedes hacer para cambiar el prisma con que ves las cosas. Recuerda siempre que la REALIDAD NO EXISTE, LO ÚNICO QUE EXISTE ES LA PERCEPCIÓN QUE TU TIENES DE LA REALIDAD.

Si tú percibes el egoísmo, rabia, maldad de los demás llenarás tu mundo de esos sentimientos, pues tu interior es en gran medida tu mundo. Si transmutas esos sentimientos llegando a la comprensión, compasión y tolerancia hacia los otros no desarrollaras en tu interior sentimientos negativos.

COMPRENSIÓN: Reflexiona sobre los motivos por los cuales una persona puede ser egoísta, mentirosa, realizar acciones malvadas… Intenta comprender que todos tenemos una historia detrás que puede llegar a explicar esas actitudes que nos molestan. Por ejemplo, una persona competitiva que pasa por encima de los demás para conseguir lo que quiere puede que haya tenido un padre muy exigente que le castigaba severamente si no conseguía ser el mejor.

COMPASIÓN: Desarrolla tu empatía entendiendo que todos los seres humanos estamos hechos de lo mismo, que sufrimos, nos alegramos, nos preocupamos y que muchas veces ciertos comportamientos o actitudes son tapaderas o producto de esos sufrimientos, presentes o pasados o miedos futuros.

TOLERANCIA: Se trata de aceptar que somos imperfectos, que todos nos equivocamos en nuestros actos o pensamientos, que muchas veces hacemos daño creyendo que es lo mejor o producto de un conflicto de intereses propios del instinto de supervivencia. Ser más tolerantes nos ayudará a no caer en actitudes victimistas y ampliar nuestra capacidad de perdonar.

Buen trabajo

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